El fallecimiento de Mila Yankelevich en un accidente en Miami generó un verdadero pesar en el mundo del espectáculo.
La historia detrás de la serie Margarita tiene un componente profundamente humano que hoy, tras una tragedia inesperada, cobra un significado aún más emotivo. Mila Yankelevich, la hija menor de Tomás Yankelevich y Sofía Reca, no solo fue espectadora del trabajo de su padre: también fue una voz clave en la etapa de edición de la serie que se convirtió en un éxito en 2024. Su mirada infantil ayudó a moldear el producto final y su huella quedó impresa en un detalle narrativo que hizo la diferencia. A un año de aquel aporte, su repentina muerte a los siete años conmocionó a todo el ámbito artístico argentino.
El 28 de julio de 2025, Mila perdió la vida tras un accidente náutico en la bahía Vizcaína, entre Miami y Miami Beach. La menor participaba de su última semana en el campamento de vela del Miami Yacht Club, en Watson Island, cuando el velero en el que navegaba con otros cinco tripulantes -un adulto y cuatro niños- fue embestido por una barcaza de gran porte.
Según informó la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida (FWC), la embarcación volcó violentamente entre las islas Monument e Hibiscus, provocando un hundimiento instantáneo. Las cámaras de seguridad captaron el dramático momento del impacto.
En medio del luto, resurgió una anécdota que Tomás Yankelevich había compartido en agosto de 2024, apenas se estrenó Margarita. En una entrevista con OLGA, relató cómo su hija menor influyó directamente en la narrativa de la serie: "Mis hijos me ayudaron a ver los videos y hacer algunas notas para pasarlas a los editores", dijo entonces. Mila, aunque ya sabía leer, le hizo notar que no alcanzaba a entender algunas escenas con celulares debido a la velocidad de los mensajes. "Me dijo que, al haber tantas interacciones con celulares, no llegaba a ver qué sucedía".
Ese comentario provocó un giro en la edición. "Surgió de ella", remarcó Yankelevich, explicando que el equipo decidió incluir una voz en off para acompañar esas escenas, permitiendo que los espectadores más pequeños también pudieran seguir la historia. "Porque son detalles que uno pasa por alto al poder leerlos, y hay que tenerlo en cuenta porque tenés un target de 6 años que ven Margarita", reflexionó.
La participación de Mila fue parte de una dinámica familiar que combinaba el trabajo con momentos compartidos. En agosto de 2024, viajó a Buenos Aires para asistir al estreno de la serie y al Cris Morena Day en el Gran Rex, donde subió al escenario junto al elenco y cantó "Hay un cuento". Aquella jornada, que parecía un juego entre padre e hija, hoy se resignifica como un testimonio del vínculo entrañable que compartían y del talento precoz de una niña que, sin saberlo, dejó su marca en una de las producciones más vistas del año.